La impermeabilización en cubiertas a gran altura requiere un diagnóstico técnico detallado. Se identifican fisuras, puntos críticos de filtración y zonas con acumulación de agua. Posteriormente, se realiza una limpieza exhaustiva y una preparación mecánica de la superficie para garantizar la adherencia del sistema impermeable.
Una preparación adecuada prolonga la vida útil del recubrimiento y evita futuras intervenciones correctivas costosas.
Existen múltiples tecnologías para impermeabilizar cubiertas: mantos asfálticos, membranas líquidas de poliuretano, sistemas acrílicos y cementosos. La elección depende del tipo de estructura, condiciones climáticas y tráfico peatonal.
En trabajos en altura, se priorizan sistemas de fácil aplicación y alto rendimiento, que puedan colocarse de forma segura y rápida sin comprometer la calidad del sello impermeable.